El violento asalto quedó registrado en la cámara de seguridad de la nueva sucursal de la firma.
Cuando hablamos de empresas familiares por lo general nos referimos a la origen de las mismas. Pero acá, quedó en evidencia que se trata de un emprendimiento familiar. Los hijos, de 17 y 19 años, habían quedado a cargo del local al irse un rato antes sus padres. En ese momento, la peor situación llegó a la puerta.
Dos ladrones arribaron al ingreso del negocio ubicado en Arturo Alió al 800. Uno dejó la moto en la vereda, oficiaría de “campana”. Mientras una clienta preguntaba por el cotillón que se vende en el comercio, el otro delincuente entró amenazando a todos con un arma en la mano.
Los chicos, sin oportunidad de escapar detrás del mostrador, le entregaron la recaudación, computadoras y teléfonos. Tampoco querían poner en riesgo con su resistencia a la joven que estaba por comprar. A ella, incluso, el ladró le sacó sus pertenencias. De terror.
“Los chorros tenían un arma con la que apuntaron a nuestros hijos y los hicieron tirar al piso”, le contó, todavía en shock, la madre de los chicos a El hecho ocurrió a plena luz del día: minutos después de las 3 de la tarde de este sábado.
Además, la familia lamentó el robo porque están expandiendo el negocio a una nueva zona de Mar del Plata: “Abrimos hace dos meses”, agregó Yesica, la dueña. El local de cotillón tiene otra sucursal en la zona de Constitución y empezó con mal trago su experiencia en el barrio 9 de julio.